martes, 10 de marzo de 2009



Si desde mi balcón te hubiese visto llegar…

Si pudiera intuir tu presencia, mis nervios no alterarían mis pulsaciones.


Si apoyaras tu brazo en mi hombro…

Si con un pequeño gesto lograra levantarte, no estaría tan triste esta noche.


Si no te fuera la vida en ello…

Si me dejaras ayudarte, no habrías tenido que gritar hasta el llanto.


Si, si, si…

Si basamos la vida en las suposiciones, en los condicionantes que ya pasaron o pueden pasar… Si no logramos apartar de nuestra cabeza ese pensamiento que nos hace dudar hasta del pasado. Si conseguimos incluso anularnos por un monosílabo que con tilde tiene una connotación tan diferente…


Si eso ocurre, es que nuestra mente no nos deja vivir el presente. Porque una afirmación es un hecho y lo demás son sólo suposiciones.


8 comentarios:

  1. Preciosa entrada y una gran verdad. Nuestra vida se llena de condicionantes y carece de afirmaciones. Falta hace buscar el sí con tilde.

    Mis mejores y más sinceros deseos de mejoría.

    Un besico.

    ResponderEliminar
  2. Que razón tienes, querida. No tendríamos que nombrar ese si posibilidad, ese si sueño, ese si quizás...
    Deberíamos decir sí a la vida y a todo lo que ella conlleva.
    Espero que vaya mejorcilla de todas sus lesiones y que esté durmiendo mejor.
    Un beso fuerte.

    ResponderEliminar
  3. Estoy de acuerdo con Ani. El "si" condicional es horrible, da sensación de cosa irreal, de algo imposible, de sueño que sabemos que no se puede cumplir.

    El "sí" afirmativo es mucho más interesante... también más difícil y más valiente. Sobre todo cuando es una afirmación para uno mismo.

    Me ha parecido un escrito precioso, Corde. Un poema magnífico.

    Gracias por compartirlo.

    Un beso.

    ResponderEliminar
  4. Estoy con Ani, todos a por el SI con mayúsculas, sin medias tintas.

    Cuidese!

    ResponderEliminar
  5. El " si afirmativo"(como dice,Julien)..ese es el que tienes que hacer tuyo..como lema a seguir.

    Tu puedes,no lo dudo.

    Besitos..muchos.

    ResponderEliminar
  6. Personalmente, me encantan las palabras cuyo significado cambia por un tilde. El caso del condicional a la afirmación me parece de libro. No a las faltas de ortografía, sí a los síes.

    ResponderEliminar
  7. Cuando mis niñas eran pequeñas a veces las observaba jugar sin que me vieran. Se inventaban pequeñas representaciones que luego nos hacían ver sentados en el sofá.
    Mientras las preparaban iban diciendo: Y si...? Y si...? Y si hacíamos de ver que...?

    Yo creo que estaban haciendo el ensayo general de lo que iba a ser su vida después.
    Esa es la parte buena del asunto.

    Cuando jugamos a inventar el futuro necesitamos usar esa pequeña palabra sin tilde, y después ponernos en movimiento, dar el primer paso.

    Otra cosa es estar anclados en el pasado, perdiendo el tiempo, pensando en lo que pudo haber sido y no fue.

    Corde, juguemos a las casitas, imaginemos lo que nos gustaría que fuese nuestra vida, y demos un pasito, sólo uno pequeñito, para empezar a dibujar el acento de nuestro SÍ.

    Sólo uno, pequeñito. Yo, ahora mismo, no doy tampoco para más.

    Un abrazo de los que te gustan.

    ResponderEliminar
  8. Sí, queridos. Todos tenéis razón. Me reafirmo por una vez y sirviendo de precedente.
    También me encantan las palabras que cambian de significado por una tilde (¿diacrítica se llamaba?). Dualidad al máximo. Y paso a paso, como todo.
    Un besico a todos.

    ResponderEliminar