miércoles, 7 de diciembre de 2011

Y que pasen otros 50...



Amor mío:

Te podría dar 50 razones por las que te quiero, 50 "fortalezas" y 50 "debilidades" que hicieron que un día me enamorara de ti. La cuestión es que me gusta susurrártelas al oído y de momento mis 50 razones (y más), las tengo conmigo y las comparto contigo.

Está siendo un cumpleaños raro, de esos que nunca te esperas pasar así, pero que llega la vida y, como no entiende de fechas, te deja sorpresas como ésta. Como yo creo que la vida tiende a equilibrarse, seguro que los 51 los pasas fuera de la habitación y de la cama, con buen color y con ese divino pelo cubriendo ya tu preciosa cabellera.

Lo que me gusta de tu 50 cumpleaños, aparte de que los cumples, es que se demuestra que hay mucha gente que te estima y te lo expresa. Mensajitos, llamadas... cualquier detalle cuenta y además sé que lo agradeces. No importa lo cansada que estés, te gusta que te feliciten porque un año más cumplido es un año más vivido y a ti te gusta vivir. Y eso me emociona.

Tengo 50 pensamientos, 50 regalitos, 50 I love you y 50 sonrisas que darte en este día. Pero sobre todo te tengo a ti como fiel compañera, te tengo cerca y no me canso de mirar lo preciosa que eres por dentro y por fuera. Así que si este día no es bueno, nos quedan 366 días para celebrar que pasaste de década, 366 días para demostrarte que cada día es una celebración y 366 días para decirte que eres lo mejor de mi vida. Y no pienso cansarme de decírtelo, aunque puede que tú si que lo hagas, a veces soy de un pesado que no se puede aguantar.

50, 50 , 50... Un número redondo para mi persona perfecta.

T'estimo amor meu!

PD: Seguiré besando tus cicatrices al menos otros 50 años más, ¡ya tú sabes!


PD: Enseño mi lado más ñoño, que también lo tengo. I love you!


sábado, 20 de agosto de 2011

Una jornada particular... y un cuadro espectacular.

Maricarmen Giménez. 1934

Este cuadro me lo regalaron hace dos días. Tiene un especial significado para mí, pues está pintado por mi yaya. Y yo, hasta ahora, no tenía nada que me recordara a ella. Es el regalo más bonito que me han hecho nunca (respetando regalos preciosos que he recibido de personas a las que quiero profundamente) y, que me lo haya regalado mi tía, significa mucho para mí. Claro que la jornada había comenzado mucho antes.

Justo hace dos días pasamos una tarde preciosa, especial, emotiva... Comer una buena paella con la mejor compañía lo hace todo muy fácil, de verdad. Y esa casa es un refugio hermoso, que te ayuda a conversar tranquilamente, sin atropellos, sintiéndote escuchada. Ese ambiente se da gracias a cómo son mis tíos y también a cómo han hecho de una casa un hogar de verdad.

Tras la comida -y siempre después de recordar viejos tiempos echándome en la misma cama donde dormía cuando viví allí- seguimos con la conversación en el salón más acogedor que he encontrado nunca. Mis tíos tienen una manera de ver las cosas muy lógica y similar a lo que yo considero que debe ser la vida, lo que hace que estemos en buena sintonía. Mi tía es dulce, muy educada, sensible... ¡Pura dinamita! Si te tiene que decir algo o si duda de que estés actuando correctamente, también te lo va a decir, que ser buena no significa ser tonta. Y mi tío sabe de todo, todo lo conoce, todo lo estudia... Es muy meticuloso, pero también tiene un gran sentido del humor y es un poco pillín.
Afables, divertidos, cultos y... ¡hasta deportistas! Lo que yo querría ser de mayor, vaya.

Tras bebernos unos mojitos espléndidos que hace mi tía, esas virtudes crecieron todavía más y comenzó un ritual catártico que para mí culminó con el regalo de la noche (y eso que ya me habían hecho un regalo por mi cumpleaños). Ella bajó disimuladamente al piso de abajo, trajo un cuadro y me dijo: "Es el cuadro preferido de esta casa y es para ti. Lo he estado pensando durante dos horas y creo que es lo mejor que puedo hacer, dártelo en vida". Y yo me quedé parada, emocionada y atontada, sin saber qué decir. Seguramente dije muchas cosas, pero ni de casualidad se acercan a la gratitud que siento, porque por fin mi casa se parece más a un hogar gracias a ellos. Hay algo que forma parte de mi vida y de mis sentimientos en esta casa desde aquel día.

Mis tíos, que son muy generosos, son nuestros testigos de boda. Creo que es otro detalle que los define. Soy muy afortunada de que me quieran porque yo a ellos los adoro.
Y creo que mi tía se parece muchísimo a mi abuela... ¡Muchísimo! Y mi abuela era la mejor persona de este mundo, así que mi tía no le va a la zaga, no. Y muchas veces en su mirada veo a la yaya y soy feliz.

Para vosotros, Blanca y Antonio:


jueves, 23 de junio de 2011

FINITO


CERRADO POR PÉRDIDA DE ILUSIÓN. CUANDO LAS MUSAS VUELVAN, SI ES QUE LO HACEN, PUBLICARÉ DE NUEVO. DE MOMENTO, YA TENGO BASTANTE CON RECOGER LOS PEDAZOS DE MI ALMA QUE ANDAN POR AHÍ, DESPERDIGADOS.

CIAO. ¡NOS VEMOS POR LOS BARES!

miércoles, 8 de junio de 2011

Quiero un cambio.


"Nuestra cabeza es redonda para permitir al pensamiento cambiar de dirección". (Picabia)

La canción que vais a escuchar salió a la luz el año más difícil de mi vida. Un año en el que tuve que crecer y madurar a fuerza de tortas.

Y ahora, aún con la cinta de cassette del disco rondando mi cabeza, pienso en ella. What's going on? Pues pasa, entre muchas otras cosas, que queremos revolución.
No sé rezar, es verdad, pero si supiera, algo como esto pediría.






VEINTICINCO AÑOS, TODAVÍA ESTOY VIVA AQUÍ
INTENTANDO LEVANTAR ESA GRAN COLINA DE ESPERANZA
POR UN RUMBO

ME DI CUENTA RÁPIDAMENTE CUANDO SUPE QUE DEBÍA
QUE EL MUNDO FUE CREADO PARA ESTA FRATERNIDAD DE HOMBRES
PARA LO QUE SIGNIFIQUE ESO

Y A VECES LLORO
CUANDO ESTOY EN LA CAMA PARA SACAR TODO
LO QUE ESTÁ EN MI CABEZA
Y YO, ME SIENTO UN POCO PECULIAR

Y ME DESPIERTO POR LA MAÑANA
Y SALGO AFUERA
Y RESPIRO PROFUNDAMENTE Y ME SIENTO REALMENTE BIEN
Y GRITO DESDE LO MÁS ALTO DE MIS PULMONES
¿QUÉ ESTÁ PASANDO?

Y DIGO HEY, HEY, HEY, HEY
DIJE HEY, ¿QUÉ ESTÁ PASANDO?

Y DIGO HEY, HEY, HEY, HEY
DIJE HEY, ¿QUÉ ESTÁ PASANDO?


E INTENTO, OH MI DIOS, INTENTO
INTENTO TODO EL TIEMPO, EN ESTA INSTITUCIÓN

Y REZO, OH MI DIOS, REZO
REZO A TODA LA SANTIDAD
POR UNA REVOLUCIÓN

Y A VECES LLORO
CUANDO ESTOY EN LA CAMA
PARA SACAR TODO
LO QUE ESTÁ EN MI CABEZA
Y YO, ME SIENTO UN POCO PECULIAR

Y ME DESPIERTO POR LA MAÑANA
Y SALGO AFUERA
Y RESPIRO PROFUNDAMENTE Y ME SIENTO REALMENTE BIEN
Y GRITO DESDE LO MÁS ALTO DE MIS PULMONES
¿QUÉ ESTÁ PASANDO?

Y DIGO HEY, HEY, HEY, HEY
DIJE HEY, ¿QUÉ ESTÁ PASANDO?

Y DIGO HEY, HEY, HEY, HEY
DIJE HEY, ¿QUÉ ESTÁ PASANDO?

Y DIGO HEY, HEY, HEY, HEY
DIJE HEY, ¿QUÉ ESTÁ PASANDO?

Y DIGO HEY, HEY, HEY, HEY
DIJE HEY, ¿QUÉ ESTÁ PASANDO?

VEINTICINCO AÑOS, TODAVÍA ESTOY VIVA AQUÍ
INTENTANDO LEVANTAR ESA GRAN COLINA DE ESPERANZA
POR UN RUMBO


miércoles, 25 de mayo de 2011

15M, 22M... ¡Mi M!


Mucho se ha hablado de política estas últimas semanas. A veces, demasiado. Mucho se ha dicho de un movimiento que nació el 15 de Mayo y que aún sigue vigente en las plazas de toda España -y espero que así siga el tiempo que haga falta-. Pero este domingo, mi mayor ilusión era ir a votar por primera vez con la persona a la que quiero y os puedo asegurar que ese momento me quedará grabado para siempre.

Sí. Sé que os puede parecer excesivo, pero os pondré en antecedentes...

Vengo de una familia de derechas, de la derecha más rancia y estática que existe. Para que os hagáis una idea, hace no muchos años, unos cuatro o cinco, una nochevieja se cantó el "Cara al Sol" después de las campanadas. Y no sólo lo cantaron mis padres... también otros familiares. Es sólo un ejemplo de cómo mi familia vive anclada en el pasado y mientras se benefician de los avances sociales, siguen reclamando a ese Franco con el que tan bien se lo pasaron. Y sé que esto lo puede leer parte de mi familia -besitos-, pero los hechos son los que son y a mí no me hace gracia ver un brazo extendido, con la mano en posición "hitleriana", mientras se canta algo que llevó a una dictadura durante más de 40 años. Y menos todavía me gusta ver que lo canta gente que ni siquiera vivió esa época.

El caso es que aunque vengo de una gran familia de militares, médicos y veterinarios -si no tienes un título universitario o aparentas tenerlo, no eres nadie entre algunos de mis parientes-, yo les salí rojilla. Vamos, que soy la oveja negra de la familia -estos dos últimos años ya ni te cuento... encima de roja, va y se casa con una mujer-, y nunca se ha respetado que opine de manera diferente. De hecho, yo hace años que no iba a votar con la familia y cuando iba, llevaba mi sobre bien cerradito -aunque nunca me he callado y he dicho a quién votaba-.

Pero este año era especial. Después de resurgir en mí la rebelde que llevo dentro, gracias al movimiento que se generó tras el 15M, mi ilusión era mayor que nunca, porque además iba a ir a votar con alguien que tiene mis mismas ideas políticas, algo que nunca había hecho.

Recuerdo el domingo 22M con mucho cariño. Nos levantamos, desayunamos con tranquilidad, nos duchamos y allá que fuimos. En casa hacía días que habíamos decidido a quién íbamos a votar. Fuera el bipartidismo, como es obvio y después a decidirnos por algún partido de la izquierda, como siempre. Por fin, tras 35 años de lucha y sintiéndome no escuchada, ni respetada, podía hablar abiertamente de mis intenciones de voto y además compartirlas con la persona que quiero. ¡Qué suerte! Y sí, os puedo decir que fue un momento muy importante en nuestra relación y muy liberador por mi parte, tras años de brusquedades por el simple hecho de tener una ideas contrarias a las del resto de mi familia.

Y lo más alentador de todas estas semanas es haber vivido con mi niña el movimiento surgido en la Plaza del Pilar, en Sol, en la Plaza Catalunya y en otras muchas Plazas de mi país. El estar acompañada, conectada, pensando lo mismo, tras cada paso que damos para ayudar a expandir este movimiento. Me siento al fin comprendida y por supuesto muy querida.

Lo siento mucho, pero nunca podría haber estado con una persona que pensara diametralmente lo opuesto a mí. Y doy gracias por ello.


PD: Que conste, que ayer pude discutir sobre política con mi padre. Parece que con los años pierde fuelle, jejejeje. En serio, me gustó hacerlo.

miércoles, 18 de mayo de 2011

15 DE MAYO.


No tengo que decirles que las cosas están mal porque todo el mundo lo sabe: Hay crisis.


Mucha gente está sin empleo, o con miedo de perder el que tiene. Las casas se venden por el valor de una vida, los negocios quiebran, las familias apenas llegan a final de mes, los usureros de la banca andan sueltos... Nadie sabe qué hacer. Y lo que es peor: No se ve una solución.


El aire es tan malo que no se puede respirar y los alimentos tan malos que no se pueden comer. Seguimos sentados ante el televisor, mientras un presentador nos cuenta que durante el día ha habido 5 asesinatos y 60 delitos violentos, como si eso fuera lo más corriente del mundo. Sabemos que las cosas están mal... Más que mal: ¡Están locas! Todo en todas partes se vuelve loco y ya no queremos salir a la calle. Nos quedamos en casa y lentamente el mundo en el que vivimos se empequeñece. Y solo decimos "Por favor dejadme vivir tranquilo en mi living". "Dejadme con mi tostadora, con mi televisor, con mi fútbol, mis programas del corazón y con mis electrodomésticos y no diré nada... ¡Dejadme en paz!"

¡Pues no voy a dejarles en paz! Quiero que se irriten conmigo. No que protesten, ni que hagan manifestaciones, ni que escriban cartas a sus diputados... Porque yo no sabría decirles qué es lo que deben escribir.


No sé qué hacer con la crisis, ni con los banqueros, ni con el terrorismo, ni con las clases políticas. Lo único que sé, es que tienen ustedes que montar en cólera. Tienen que decir: "¡Soy un ser humano, maldita sea!¡Mi vida tiene un valor!"


Quiero que ahora, se levanten todos, se levanten todos de sus sillones. Quiero que vayan a sus ventanas, que las abran y que saquen la cabeza y griten: "¡Estoy más que harto y no quiero seguir soportándolo!"


Luego pensaremos lo que hay que hacer con la depresión, con la inflación y con la crisis de petróleo. Ahora es su oportunidad, vayan a sus ventanas, saquen la cabeza y griten:


"¡ESTOY MÁS QUE HARTO Y NO QUIERO SEGUIR SOPORTÁNDOLO!"


Escrito por un chico de la Acamapda ZGZ. Tomado de la película "Zeitgeits"

viernes, 8 de abril de 2011

Cantando bajo la lluvia de mis ojos.



Llevo todo el día de lo más tiernecita. Bueno en realidad llevo así más de un mes, puede que años. En el fondo y por más corazas que me ponga soy una chica bastante moñas, sensible hasta decir basta... incluso sangrante en este aspecto. No sé, me he vuelto una floja de narices, una moñas de esas cansinas.

Lo analizo y pienso: En mi vida se conjuntan dos sentimientos que nunca desaparecen. El dolor y el amor. No siguen un orden estricto, pero ahí están. Y eso amigos, es una bomba para mi alma.

No sé si es por eso del amor o de lo otro, que hoy estoy aquí petrificada escuchando canciones e intentando que se sequen un poquito los lacrimales. Es cierto que llevo cuarenta días siendo "mujer" con un intervalo esta última vez de dos días y mis hormonas revolotean cual niño en Disneyland París, pero no sé si ésta es la única razón.

Y es por eso, porque siento mucho amor y bastante dolor también que voy a pediros un favor, amigos míos. Necesito canciones de amor - no vale nada de Los gandules y demás enemigos- , de esas que ponen los pelos de punta, de esas que me gusta bailar con mi niña, aunque a mitad de canción mi rodilla diga basta. Quiero llorar por lo que de verdad vale la pena; no por esas últimas canastas de los partidos; ni por esos últimos puntos de tenis; o peor, por esos goles -sí habéis leído bien- que dan una clasificación a cualquiera para cualquier cosa. Porque quiero que mis emociones se canalicen y no quiero ser un reguero de lágrimas cada vez que pongo la tele y dos personas se abrazan en una serie o cualquier otra chorrada. Quiero música en mis entrañas, quiero sentir que mis lágrimas admiran algo bello, así que, por favor os pido:

Que en vuestros comentarios pongáis un enlace de esa canción o canciones que hacen que todo vuestro universo se remueva por dentro. De esta forma, podré hacerme un concierto de esos que a mí me gustan y de paso pondré a prueba mi sensiblería o mi sensibilidad - aún no tengo claro por cuál de las dos me muevo en estos momentos-.

Gracias por hacerme feliz. Firmado: La llorona.


PD: Por supuesto, también pueden ser canciones de desamor. Así es la vida.

viernes, 1 de abril de 2011

La rubia, mi rubia.


La quiero. La quiero desde que tengo uso de razón. Es una persona cada vez más importante para mí y eso que siempre lo fue, siempre. Y tengo muy claro que va a seguir siendo determinante en mi vida, como lo ha sido hasta ahora.

Ella tiene la familia que uno siempre ha querido tener. Unos hijos y un marido que la quieren y ella vive volcada en ellos. Lo que llamamos una familia normal. Aunque tengan sus problemas, que como seres humanos que viven en sociedad tienen. Ella inculcó a sus hijos un amor por la familia único y, aunque discutan, al final todos se quieren a rabiar y viven ayudándose unos a otros. Y me consta que gran parte de la culpa ha sido suya.

La recuerdo cuando era más joven y yo una cría. Siempre guapa, capaz y resolutiva. Yo la admiraba porque tenía todo lo que mi familia no tenía, mucho amor por los suyos. Y eso ya entonces me fascinaba. Ahora, con unos años más a sus espaldas -yo también he cumplido alguno que otro- noto que cada vez se parece más a su madre, a mi abuela. Y eso me enternece, porque mi yaya era una gran persona.

Ella me quitó las tonterías de mi cabeza y me permitió estar un año en Guinea, cuando yo ya no era capaz de soportar lo que había por casa. Ese año fue muy importante para mí y ellos me lo dieron todo. No tenían por qué hacerlo, pero lo hicieron.

Y me consta que hubo un tiempo de incomprensión por ambas partes. Lógico. Tal vez si hubiera confiado más en ella en una época crítica de mi vida.... Pero ahora ella comprende y yo comprendo. Y por eso también la quiero.

Hemos discutido mucho, muchísimo. Hubo una época en que le di más de un disgusto. Digamos que mi genio y el suyo chocaban o más bien... explotaban juntos. Pero siempre lo hemos resuelto. Ella tenía que domar a una persona que estaba desbocada y yo tenía que saber cuál era mi sitio en esta familia que me he montado alternativa. Ahora puedo decir que lo hemos logrado.

Y desde que mi vida dio un giro y me enamoré de la persona que amo, me dio todo su apoyo incondicional. Ella y su familia, que tiene un marido y unos hijos que son para mí como mis hermanos. Me guía y me protege como si fuera una de ellos, porque así lo hemos querido.

Ella es mi madre, la madre que yo he escogido para contarle las cosas como haría una hija con su madre. Es sangre de mi sangre y además me quiere. No puedo decirlo de toda la gente que pertenece a mi familia, pero de ella puedo asegurarlo.

Se llama Maricarmen, es la hermana pequeña de mi madre. Es mi tía. Es la rubia que dejaba -y deja- impresionado a todo el mundo con su generosidad, en Guinea antes y en Madrid ahora. Es mi rubia también. Una rubia a la que quiero con todas mis fuerzas.


PD: Y de canción... Una de su época, que me encanta.



miércoles, 16 de marzo de 2011

No más.


No más. Toda la letra junta, sin pausas... Más intensidad. Yo no puedo ni quiero decir más. No por ahora.

A veces es difícil decir que no más pero hay momentos en la vida en los que hay que luchar,no hace falta para eso dedicarse al rap hace falta solamente decir basta ya.
No más pena,no más niños a dormir sin cena,no más lagrimas,no más dictadores para África,no más guerra-misión,no más torres en New York,no más telebasura,no más profes sin cultura,no más cáncer en tus cigarrillos,no más pastillas no más vino,no más rendirte a tu destino,no más quedarte dormido en mitad de tu camino,no más imperativos,no más hombres sin oficios,no más jefes que no le quieren,no más personas sin papeles no,no más presidentes que te mienten, no más odios que solo te conducen a odios,no más usar los periódicos para comerme el coco,no más celos entre amigos,no más guerras entre hermanos,no más luchar separados en vez de juntarnos,no más pedir perdón en vez de entrar en acción,no más desanimarse por oir un simple no.
Cuando te encuentras triste y te rindes te estas fallando no te sirves,mírate al espejo y ponte firme,tú tienes las riendas de tu propia carreta levanta la cabeza y olvidate de dar pena,no hay error más grande que tomar el camino fácil no te plantes,apuesta por seguir adelante,tu peor enemigo a veces puedes ser tu mismo así que limpia tu mente y dale oxígeno a tu espíritu no más.
A veces es difícil decir que no más,pero hay momentos en la vida en los que hay que luchar,no hace falta para eso dedicarse al rap hace falta solamente decir basta ya.
A veces es difícil decir que no más,pero hay momentos en la vida en los que hay que luchar,no hace falta para eso dedicarse al rap hace falta solamente decir....
No más piedras contra tanques,no más masacre en Palestina,no más vaticano en pedofilia,no más niños pariendo niñas,no más Africa con sida,no más lástimas si es de mentira,no más minas antipersonales,no mas políticos irresponsables,no más perder el tiempo en quejarse,no más música pop mal hecha que no te vale,no más prensa rosa ni criticar lo que no sabes,no más nunca quebrantar la voz a tu madre,no mas olvidar que debes amor al quien te pare,no machismes,no machistes,no más cliches,no mas estereoclipos que falten y discriminen,el mundo lo formamos todos la culpa no es de siempre del todo y los problemas no se arreglan solos,es hora de aceptar tu responsabilidad,si algo sale mal es por que tu lo haces mal.
Cuando te encuentras triste y te rindes te estas fallando no te sirves,mírate al espejo y ponte firme,tú tienes las riendas de tu propia carreta levanta la cabeza y olvídate de dar pena,no hay error mas grande que tomar el camino fácil no te plantes,apuesta por seguir adelante,tu peor enemigo a veces puedes ser tú mismo así que limpia tu mente y dale oxígeno a tu espíritu no más.
A veces es difícil decir que no mas,pero hay momentos en la vida en los que hay que luchar,no hace falta para eso dedicarse al rap hace falta solamente decir basta ya.
A veces es difícil decir que no más,pero hay momentos en la vida en los que hay que luchar,no hace falta para eso dedicarse al rap hace falta solamente decir.....basta ya.
No más,no más mentiras,no más islas perejil,no más deforestación en Brasil,no más maltratos policiales,no más concanasias ilegales,no más sonrisas si son falsas,no más lo primero es la pasta,no más indios en reservas,no más ultras,no más atentados suicidas,no más,no más atentados que matan a niñas, no más,no más violaciones,no más,no más.

martes, 1 de marzo de 2011

A veces...


Es mejor ser muda que hablar. Es mejor hablar que gritar. Cuando se grita demasiado, es mejor volver a ser muda y de paso taparse los oídos.

A partir de hoy seré muda en muchas facetas de mi vida. Y ésta será una de ellas.

Me voy a la cama a rezar. Sí, voy a rezar... en silencio.


viernes, 25 de febrero de 2011

No tengas miedo a contestar.



Jajajaja, Rombo es la caña, señores. Anoche me pone en un comentario "quiero más" y se queda tan ancho el tío. Como si yo no supiera que ando otra vez con mi crisis de la página en blanco. Entre la crisis esa y las otras dos -monetaria y sanitaria- o hablo de crisis o hablo de crisis.

Pero no, no me da la gana. Voy a luchar contra mi autocompasión y voy a dar tralla, que hoy me apetece.

Odio cuando en el Fotogramas entrevistan a alguien y preguntan:
F. -¿A quién no te gustaría conocer?-
Y el entrevistado en cuestión responde: - De todo el mundo se aprende.- Y se queda tan ancho/a.

Si yo fuese alguien y me preguntaran sobre ese tema en cuestión...
F. - ¿A quién no te gustaría conocer?
Yo contestaría: -Pregúntame a quién quiero conocer, que acabamos antes.-

Y es que hay tanta gente que no me interesa lo más mínimo... pero tanta... A mí todo el que no me aporte algo positivo a mi existencia, aunque sea una sonrisa en una película, no me apetece conocerlo ni un poquito. Y eso que creo que va en contra de mis antiguos principios, cuando quería dedicarme al periodismo y tener oportunidad de conocer a Dios si hacía falta, para poder entrevistarle. Debo haber cambiado mucho, pero este próximo mes me conformo con conocer a Rombo. Y en lo que queda de año, mi mayor ilusión ye conocer a la secta asturiana, es decir a Norma y a Cecil (en barbecho, pero sigue siendo él).

Y por cierto, ya que estamos, vamos a dejar bien clara una cosa. Cuando preguntan a alguien que si se arrepiente de algo en su vida y contesta eso tan típico que ya he dicho antes -No me arrepiento de nada, de todo se aprende-, para mí está diciendo la mayor tontería del mundo, seguro que se arrepiente de decirla. ¡Anda que no me arrepiento yo veces de decir según qué chorradas, de actuar de según qué forma y pasar por según qué situaciones...! El arrepentimiento y el error son las cosas que más enseñan a los seres humanos a no tropezar mil veces en la misma piedra y hacerlo sólo cien veces. Y quien piense distinto, mejor para él/ella, de verdad.

Dicho esto, voy a ver si los señores de muface, que han perdido mis documentos, me pagan unas inyecciones carísimas que tuve que abonar. Claro, como ellos sí que llegan a final de mes...


miércoles, 9 de febrero de 2011

Tuberías enrevesadas...


Tras "arreglar" la tubería y sacrificar parte del armario he de decir que la tubería sigue sangrando agua.
Sí, amigos, esto es el cuento de nunca acabar... Más o menos como mi vida.

Se arregla una tubería más o menos como se puede arreglar una rodilla, ¿no? Pero resulta que la tubería sigue estropeada al igual que la rodilla no funciona. ¿Solución? Cambiamos el codo de la tubería -ya lo podían haber cambiado antes, la verdad- y como en la rodilla eso ya sucedió anteriormente, intentamos mejorar la rodilla con unas infiltraciones.

Y algunos diréis: -Bueno, tampoco es para tanto...- . Es verdad, la tubería lleva mal un mes y algo, pero la rodilla está fastidiada desde hace casi 13 años.
Otros diréis: -¡Pues sí que es quejica la moza!-. No os faltará razón, pero como es mi cuerpo y me duele y encima estoy escribiendo en mi blog... Vamos, que es lo que hay.
Los más listos añadiréis: -Pues vaya metáfora rancia que nos ha embutido la tía-. No os culpo, pero como dentro de una semana hago 3 meses de baja (y no me dejan cogerme el alta), como que ya no sé ni expresarme decentemente.

Eso sí, para los que digan que me quejo -sí, me quejo, porque me hicieron mal mis paternos, copón-, que sepan:
Que si a eso le añadimos un brote de mi estupenda enfermedad (esa espondilitis de mis amores), más artritis en las manos, más sabañones en los pies (creía que esto era de la posguerra), más que ayer me dijeron que me tienen que quitar la tiroides y por lo tanto tomar más medicación de por vida... Y que encima hace hoy una niebla que no se ve más allá de 50 metros... Pues sí, soy una quejica, pero una quejica con muy mala hostia.

Y sé que la mala hostia me sacará adelante otra vez, aunque me tenga que oír de nuevo: -¡Ay, si es que no trabajas nada, con gente como tú no me extraña que estemos en crisis-. Pero lo que sobre todo me hará seguir por mi camino es mi niña, la que sabiendo lo que había, decidió quererme por ser como soy y no por estar como estoy. ¡Y brindo por ello!


jueves, 27 de enero de 2011

Surrealismo cruel.


Iba a escribir sobre cómo está el mundo; sobre leyes Sinde y otros paralelismos que se dan en la vida "real"; sobre divorcios; sobre por qué lo diferente asusta y además separa... En fin, iba a vomitar en mis dominios, que para eso son míos.

Pero el caso es que esta tarde ha pasado algo tan surrealista en esta casa... Sí, obviamente voy a hablar sobre mis dominios terrenales -son de mi pareja y míos y ante todo son del banco de turno-, pero no voy a vomitar sobre ellos.

Llega el fontanero a casa. Hace días que nuestra cocina pierde agua, entre otras muchas cosas (lo del electricista ya no tiene nombre) y hoy por fin iba a arreglarlo.

Como ya nos había comunicado, el fontanero se tiene que cargar la parte trasera de un armario, porque a un gilipollas cuyo nombre no voy a mentar, un tal Julian sin tilde, se le ocurrió pegar los muebles de la cocina con silicona y ahora no hay dios que los saque. Al mismo tiempo que sierra que te sierra, nuestro fondo de armario -je,je,je- llama al "portero automático" nuestro querido Julian y sucede lo siguiente:

Ruido de fondo de sierra convencional. Timbre sonando al fondo.
-¿Diga?- Digo yo.
- Soy julian.
- ¿Sí, diga?- Repito mientras pienso que ni de coña le abro la puerta.
-Soy Julian, abre.
- ¿Diga?- Y cuelgo el telefonillo, porque me entran instintos asesinos y el tío está mil veces más cuadrado que yo.
- ¿Quién era?- Me pregunta mi fontanero.
- El gilipollas que siliconó toda nuestra cocina.- Respondo sin ironía alguna.
- ¿Es que le has llamado?
- ¡No! Pero de vez en cuando llama.
- ¿Y para qué llama?
- Supongo que necesitará dinero y tendrá ganas de jodernos alguna cosa más de la casa- Espeto yo, con crueldad desenfrenada.

Tras dos minutos serrando y destruyendo el fondo del armario cual Chuck Norris pegando patadas, me dice mi fontanero:
- Je, pues por aquí parece que no pierde agua.
- Pero... dijiste que perdía agua por esos codos.- Mi desesperación se nota en la entonación.
- Pues de mometo no pierde agua. Lo vigiláis esta noche y si acaso me llamáis mañana.- Dice él, con sonrisilla y todo.
- Ya, pero es que hemos roto el mueble.- Comento, mirándolo fijamente.
- Claro, pero es que si no no podíamos cerciorarnos de si perdía agua por ahí o no. Bueno, me llamas, ¿vale?. Recoge sus cosas y va hacia la puerta.
- Mmmm, vale.- Mi voz se empequeñece de repente.

Esto ha pasado hace menos de una hora y ya no me quedan ganas ni de reír, ni lágrimas que mojen las baldosas de la cocina.

¿Lo peor de todo? El surrealismo convertido en realidad da asco.


lunes, 24 de enero de 2011

Mi Audrey Hepburn.


Yo creo que la escogí al nacer. O ella a mí. No lo tengo muy claro, ni tampoco está hablado. No hace falta. Sólo sé que es mi mayor recuerdo del pasado (el mejor junto a mi yaya), que es una flor entre tanta mala hierba y que estoy orgullosa de que me acompañara aquel día de septiembre. Y lo que nos queda.

Ya de pequeña era ella la que se ocupaba de mí. Supongo que para alguien siete años mayor que yo, tampoco era tan bonito tener a una mocosa pegada todo el día. Aunque yo creo que era bastante autónoma, pero no lo suficiente como para hacerme las cosas de la vida cotidiana.

Sí que recuerdo cómo me empezó a meter el gusanillo de la gimnasia rítmica. Cómo me tiraba y me recogía y si me hacía daño me decía: "Si lloras ya no jugaré más contigo". Y yo, que estaba ensimismada, cortaba mi llanto y me sorbía los mocos. Y siempre fijándome en ella, que era para mí como esas estrellas que otros idolatran, tan elegante como su "Audrey".

Aunque ya era un poco salvaje, fui entrenada por ella un par de años, lo recuerdo muy bien. Fueron mis dulces diez y once años. Supongo que fue casi una pesadilla para ella, pero que conste que para mí, a veces era una tortura china. Las del equipo lo pasábamos muy bien, nos divertíamos y éramos una piña. Ella exigía, pero sobre todo me exigía a mí y no me perdonaba ni una. Cuando llegábamos a casa, me seguía "machacando". Recuerdo cómo me ponía con las piernas abiertas y yo tenía que alcanzar una moneda de cien pesetas con las manos, de tal manera que lograra tocar el pecho con el suelo, pero ella la iba alejando más y más para que mantuviese esa posición que, sinceramente, me dolía. Al final, si me había esforzado lo suficiente me daba el dinero.
En esa época experimenté algo muy raro. Ella me entrenaba, pero yo nunca salía en los campeonatos -algo muy duro para una persona competitiva y deportista como yo-. Yo siempre decía: "Es que, aunque sea mi hermana, me tiene manía". Vale, no era la mejor ni de casualidad, pero una vez llegó a sacar a una niña muy sosa -pero mucho-, por no sacarme a mí. Ella dice que no lo recuerda, pero eso a mí se me ha quedado clavado. Lo último que me dijo como entrenadora fue: "Yo creo que serás más buena si sigues jugando al baloncesto y dejas la gimnasia"... Tenía razón.

Cuando llegué a la más tierna pubertad, ella ya me explicaba casi todas sus cosas. Me dejaba ropa, me enseñó a pintarme, cotilleábamos sobre sus novios y me hablaba de moda -a ella le apasiona-. En vez de alejarnos en esa época, creo que nos unimos más, porque por fin podía hablar conmigo un poco más seriamente. Me regaló mi primer libro de Katharine Hepburn (soy una frikie), me sacaba de vez en cuando a la zona de marcha de los mayores, me aconsejaba...creo que en todo menos en los estudios y en el baloncesto.

Después pasaron cosas, demasiadas como para que ella aguantara por estos lares y tuvo que emigrar. Aún en la distancia, nos seguíamos escribiendo y apoyando. Fue una época muy oscura que nos marcó a las dos para siempre, pero nunca perdimos el contacto e incluso viajé a escondidas para estar con ella un mes en Irlanda. Un mes muy bonito y que tuvo sus consecuencias.

Y creo que no me equivoco si digo que nunca hemos tenido una discusión seria, una pelea. La base es que, aunque pensemos de diferente manera, las decisiones que tome una o la otra, son decisiones válidas, porque confiamos en que creemos que es lo mejor para nosotras. Hace año y pico, me apoyó cuando iniciaba una relación y me seguirá apoyando, como yo a ella. Sé que lo ha pasado mal y ella sabe que yo también. Pero las dos sabemos que, con nuestros defectos, somos buenas personas.

Tiene un hijo que es un amor. Y no es coincidencia, es que lo ha educado muy bien. A veces no le entiendo, bueno casi nunca porque habla inglés, pero disfruto con él. Es un niño sensible, educado y muy generoso... Como ella. Y lo ha criado sin padre -con unos abuelos ingleses que son otro amor-, pero se ha deslomado para darle lo mejor y si no se lo podía dar, hacer que entendiera que en realidad es un privilegiado. Creo que lo comprende y de mayor será un gran chico. Espero que los ingleses, no lo fastidien.

Ella es mi hermana, mi tati. Tengo dos más, pero no me entiendo con niguna como me entiendo con ella. Creo que es porque nos elegimos hace tiempo. Es una de las personas más importantes de mi vida. Y le agradezco que me haya cuidado como lo ha hecho. Y que lo siga haciendo, como yo también intento cuidarla a ella.

Sí, creo que soy mejor persona porque aprendí de ella. ¡Y menos mal!






jueves, 13 de enero de 2011

Mina... de... carbón.


Te iba a mandar una nota con palabras manidas o con expresiones mil veces usadas. Que si "happy birthday to you, happy birthday to you...". "Feliz, feliz en tu día..." Supongo que no dejaré de hacer eso, pero no voy a enviarte una felicitación. Este año no.

Es curioso cómo se puede querer a una persona antes de conocerla. Eso me pasó contigo, puesto que tardé en conocerte, al menos físicamente. Sé que suena raro... sí, igual retumba en tu cabeza y te explota, pero no me desdigo.

Así que después de tanto edulcorante -creo que he terminado expresándome como no quería- te voy a decir...

Que tienes una de las miradas más limpias que he conocido. Que sí, que puede llegar a asustar si no se está acostumbrado, pero se puede ver lo que piensas a través de tus ojos... Creo que viene de familia.

Que tu voz da paz y cordura, aunque a veces te sientas la persona menos cuerda... Tu serenidad es aplastante y contrasta con mi inseguridad y mis palabras atropelladas.

Que lo que sale de tu cabecita loca es oro, que manejas el lenguaje como quieres, pones quitas, repones y le das la vuelta a las cosas de manera espectacular. Me conmueve al mismo tiempo que me enrabieta por no saber hacerlo como tú. Pero también te quiero por eso.

Que tienes humor negro, amarillo y eres escatológica en una frase y dulce en otra... Y no te queda mal, tienes ese don. Seguro que hasta cuando insultas lo haces con una elegancia aplastante.

Que ya van 27 lúcidos años, con sus gozos y sus sombras, como la vida de cualquiera. Espero que pese más la alegría que la tristeza, lo espero de corazón.

Y que gracias por escuchar, incluso cuando es evidente que no tienes ganas de hacerlo. Soy consciente a ratos de que mis intentos de mediación cansan al más peinado.

Supe que te iba a querer cuando me empezaron a hablar de ti. Y ahí sigo, como si de una hermana mayor se tratara.

Ya ves que al final todo lo escrito está manido y es cursi, pero si tú te pusiste aquel vestido rosa ese día de septiembre, creo que no pasa nada porque este chicle de fresa endulce tu "happy birthday".

Pongo en mi boca este poema del gran Benedetti.

VIVIR

Vivir es una loca maravilla

una proeza llena de promesas

con enigmas que vienen en la sombra

y canciones que son como banderas


vivir es trasladarse poco a poco

envueltos en el aire y el paisaje

sabiendo que a la vuelta de la esquina

todo es sencillo/ nada es memorable


y sin embargo en esa mansedumbre

esa dulzura / esa tolerancia

hay secretos que son para esconder

en los bolsillos y pliegues del alma


vivir es una suerte a corto plazo

aprovecharla es nuestro compromiso

no importa que fantasmas nos espíen

si al fin uno está en paz consigo mismo


hay que saber vivir con utopías

y con otras variantes de esperanza

y disfrutar lo mágico de un beso

al menos siete veces por semana.

PD: Algún día te escribiré algo que merezca la pena. El invierno no me deja navegar en un mar azul y tranquilo.