viernes, 19 de febrero de 2010

Mudando la casa, que no el corazón.


"No puedo vivir sin ti... no hay manera.
No puedo estar sin ti... no hay manera..."



En nueve días nos trasladamos a la que va a ser nuestra casa (y la del Banco) durante los próximos titantos años. Estamos felices y agobiadas, pero sin duda esto es el comienzo de algo más, el comienzo de algo soñado por las dos durante largo tiempo.

Poco a poco, la casa tomará nuestro aire y nuestros gustos y se irán haciendo las cosas lentamente, pero con gran gusto, que para eso lo tenemos.

"Yo me quedo para siempre con mi Reina y su bandera,
ya no hay fronteras.
Me dejaré llevar ... a "este" lugar..."

PD: Todos los que queráis ayudar, por favor, no lo dudéis. Necesitadas de ayuda nos hallamos. ¡Hala pues! (gracias en oregonés).

8 comentarios:

  1. Pues a armarse de paciencia, que lo de la mudanza siempre es una paliza. Poneros de musica de fondo la del anuncio (cómo me gustan los anuncios del Ika y cuanto me deprimo al apartar la vista de la tele y ver que mi casa no se parece en nada a las que ellos sacan) a ver si eso os da ánimos.

    ResponderEliminar
  2. Mucho ánimo es lo único que os puedo enviar desde aquí... es mucho curro, sí, pero también es cierto que mola mucho, mucho. Organizar, decidir, mover una y mil veces hasta que las cosas encuentran su sitio...
    Besos, muchos.

    ResponderEliminar
  3. De momento ya hemos decidido que lo que iba a ser nuestra habitación va a ser la biblioteca y habitación de invitados -aunque no creo que venga nadie, no somos muy famosas entre los seres humanos- y la verdad es que nos gusta el cambio.

    El tiempo corre en contra. Hoy es miércoles, nos trasladamos el viernes y ni hay cocina, ni calefacción, ni hemos podido pintar, ni ...

    Yo estoy de baja por la espondilitis anquilosante que me ataca vilmente a las caderas y mi niña ayer se cortó con un cúter en la mano y lleva un tajo de no te menees y cinco puntos para el recuerdo. Así que la cosa es de chiste. Una manca y una coja haciendo mudanza... Podéis terminar la historia los demás, pero con un poco de respeto, vale?

    ¡Viva las mudanzas!

    ResponderEliminar
  4. Querida Perleta del Ebro ^^

    Las mudanzas son lo puto peor, vamos es un trámite que hay que pasar si o si. Además se pasa mejor pensando en que por fin habeis podido cumplir vuestro sueño. Ahora teneis algo que siempre deseasteis (aunque lo compartais con el banco). Enhorabuena a Mari, (a ti te pueden dar ya lo sabes ;). También te quiero)

    Oyes!! Que digo yo que eso habrá que inagurarlo en plan gorroneo ¿no? Osea, que me deis de comer, beber y dormir gratis ^^.

    Lo dicho! Que me alegro mogollón y que ya tengo sitio de gratis en Zaragoza para no pagar hotel. Jojojojojojo

    Besitos a las 2!

    ResponderEliminar
  5. Yo perdi 8 kg en la ultima mudanza, jeje. Vale que me sobraban y vale que me tire de mudanza casi un mes, vale que no habia ascensor y vale que me monte los muebles practicamente solo. Total, una gozada eso de la mudanza. Lo mejor, cuando ya tiene su casita lista para disfrutarla a tope. Mucho animo para las dos y espero, algun dia, aunque sea remoto, de estrenar ese cuartillo de invitados que esta poniendo usted.

    ResponderEliminar
  6. Bueno, pues aquí estamos, Corderita.

    ¿Sigues pensando lo mismo que hace diez días ahora que estamos en medio del caos?

    Otra pregunta: A la Perleta... la dejamos venir ¿no?

    ResponderEliminar
  7. Mudanza hecha. Ahora es el momento más caótico. Todo lleno de cajas y un cansancio que no se puede aguantar.
    Estáis todos invitados a conocerla, pero eso sí, de aquí a mes y medio que es lo que creo que nos llevará retirar las cajitas de los collons y de paso, como dice una amiga, reciclarlas.

    Un besico maño a todos, incluso a la Perleta del Turia, esa catalana del sur tan resalá.

    ResponderEliminar
  8. Vaya, llegué tarde para echar una mano ... :) Con la ilusión que me hacía conocer Zárágózá, oye.
    Bueno, aún así me alegro que vaya quedando menos. Las mudanzas son un horror tremendo, pero y lo rico que se está cuando descansas con una tacita de café (o té) frente a lo que es tu hogar...Jo.
    Yo una vez lo sentí.

    ResponderEliminar