NBA en NY

   Para los que me conozcan de un ratico, ya sabéis que me encanta el baloncesto. Y, aunque considero que el baloncesto europeo y por supuesto el español está en mejor momento que la NBA, si vas a ver a los yankis y eres aficionada, es un delito no deleitarte con un partido en el Madison Square Garden.

   Crecí viendo a Kareem Abdul Jabar, Magic Johnson, Larry Bird, Isahias Thomas y otros tantos. Los Celtics, Los Lakers, los (Bads boys) Detroit Pistons... Más tarde aparecieron Jordan, Ewing, Bradley and company. Eran los mejores, como aquel maravilloso Dream Team de Barcelona. Ahora han llegado otros y resulta que ya no sólo es Fernando Martín el que prueba suerte entre las estrellas que buscan el ansiado "anillo de oro". Ahora hay españoles que deciden partidos y pronto decidirán títulos, como Gasol, Calderón, Navarro o Garbajosa (si deja de lesionarse). ¡Cómo ha cambiado este deporte!

   Y claro, en el consabido viaje a la Gran Manzana, decidimos ir a ver el basket. ¿El partido? New York Nicks vs Memphis Grizzlies... sí, un asquito, considerando que son de los peores equipos de la liga americana, pero al menos había un jugador from Spain (redoble de tambor...), La Bomba Navarro.

   El lugar? Muy grande, aunque no diera la sensación de grandiosidad que esperaba. ¿Acompañantes? Davidik, que el pobre aún no ha visto en directo un partido decente, y mi hermano Javi. ¿El himno? Lo cantó un niño, qué "lindo"... ¿El partido? Nada que resaltar, salvo que ganaron los Memphis (y mira que son peores fuera de casa). ¿Espectadores? la mitad españoles, la otra mitad, supongo que de los Nicks. Claro que no está de más nombrar, a las tres histéricas que estaban a mi lado, con origen hindú pero muy americanas ellas e intentando que el imperio pro- Bush no se fuera al garete por lo ejpañolitos que admiten las bodas entre homosexuales. Un horror estar a su lado, vamos. ¿Fotos? demasiadas debidas al aburrimiento del "gran" espectáculo ofrecido. 

  Pero no sólo se puede ver un partido en NY. También tienes la "NBA Store", lo cual para un energúmena como yo puede llegar a ser un terrible dolor de cabeza. Se encuentra en la 5ª avenida con la 52, vamos, todo recto desde casa, y es una perdición. Claro que por las fechas y como NY está tan barato no había más que "compatriotas" comprando. Para cuando Davidik me dejó entrar (sigo con resentimiento), todo lo de Gasol y lo de Calderón estaba agotado. Casi muero. Unos días más tarde, seguía agotado lo de Calderón, pero a Gasol le habían puesto toda una sección para él. Estaba por todas partes: en los marcadores, en un cuadro (pintado el día anterior, creo yo), camisetas por todas partes. Lo que son las cosas, hasta Davidik terminó comprando una camiseta suya (culpa del consumismo que nos abordaba, seguro).

   Ya había cumplido otro de los muchos objetivos de mi viaje a Nueva York. Otro tópico, pero que si te gusta el basket es importante verlo realizado.